5/25/2009

VENTRILOQUIA

Quien habla
en el vértice de una rolliza imagen
que desbarató los planos equilibrados.
Un hombre sentado sobre otro hombre
que no es lo mismo
que parado sobre sus hombros.

Hay quien se deja hablar
para ser él mismo
y hay quien en la duermevela
se funde
a una articulación doblegada
hay quien al dar vueltas
la página
ha dejado de ser
y en los pliegues de sus gestos
borra
la mecánica del cuerpo.

Hay quien llora por otro
por una módica suma
y está el que usa el muñeco
habiendo interrumpido una voz
hay quien muere
y resucita
y es la voz de Dios
que no alcanza para mover
todos los hilos
no se oye
no se mira
no se palpa
no se incendia de amor
deja que lo hablen
deja que lo atraviesen
deja de dejarse
y se entierra en una caja.
Día a día
se olvida de sí
y todos nos olvidamos de él
y de sus gestos pintados.

Jorge Alberdi –10/2005

1 comentario:

Julieta dijo...

Hay quienes se abandonan.

Saludos Poeta!